martes, julio 30, 2013

La vida es bella



Ayer soñé que me mataban
y he de decir con orgullo
que morí bien.

Dejé la vida como bajar del autobus,
apenas un gesto abatido de los labios
se me escapó
cuando desapareció mi vida para siempre.

Fue una muerte digna
No me rendí,
No supliqué.
Perdí todo lo que soy,
Perdí todo lo que tengo
perdía los besos, el mundo, todo…
pero hacía frente.

Mis asesinos
que eran cuatro
se dieron perfecta cuenta
de lo criminales y traidores que eran.

Sus navajas abrían mi carne
y me desgarraban igual que se quema un puente
y yo mugía como mi sangre,
igual que el toro
que embiste a la muerte.

Al final me quedé tranquilo,
Ya muerto en el suelo.
Feliz de haber muerto tan bien
con tanta fuerza,
feliz de no haber dado
ningún triste espectáculo
de dolor
porque la vida es bella.

No hay comentarios: